Un amigo me pidió hace poco que hiciera "otro de esos collares que tú sabes hacer. Especial".
Creo que sé lo que él quiere y vuelvo una y otra vez a la idea, pero mi mente se expande con el calor y lo único que me ofrece son recorridos cortos en un largo camino, sin dar tiempo a que cuaje nada.
Hoy saqué de una de mis cajas unas ágatas - naturales, me dijeron cuando las compré - que me cautivaron en su día por su color, forma y amable oleaje. Cada cuenta me recuerda la delicadeza de los grabados japoneses, sin llegar al tsunami de Hokusai. No, estas piedras invitan al sosiego y al recuerdo... De hecho, la primera vez que las vi, hace más de un año, no las compré porque me parecieron caras, pero con frecuencia las visualizaba y me arrepentía. En una ocasión volví a la tienda por otras cosas y se me ocurrió mirar en la bandeja donde las había visto. Ahora, ristras y ristras de otras piedras se acumulaban en un montón donde el azul malva no asomaba. Desistí. Cuando salía, después de haber pagado, impulsivamente pedí a la dueña que me sacara la bandeja de la vitrina. Ahí, al final de todo, estaban las ágatas esperándome... Así ha sido mi vida.
Pero lo que quería era contarles el efecto que producían en mí las lentejas de mi abuela.
Parece ser que en casa de mi abuela se comían muchas lentejas. Cada vez que la visitaba tenía montones de lentejas que limpiar. Me enseñó a distinguir entre una buena lenteja y otra que podíamos permitirnos el lujo de desechar. Me sentaba a la mesa camilla, con su hule amarillento, y allí comenzaba mi silenciosa odisea. Esta tarea era una de mis favoritas. Mientras separaba las limpias de las avirueladas, mi imaginación recorría los lugares del Capitán Trueno y su enamorada Sigrid y otros tebeos de hadas que era lo que llegaba a mis manos entre los ocho y diez años. Sí, también se entrometían escenas más realistas que yo rechazaba por lo comunes y corrientes en mi vida. Por cada diez lentejas yo me alejaba de la realidad milenios (claro, no sabía lo que era un milenio!) Agrupaba a las lentejas del montón de acuerdo al color, el grosor y la forma. Creaba la coreografía de un ballet donde yo era la estrella, cómo no! En fin, fantasías de niña.
Ayer me encontré haciendo algo parecido pensando en este collar "especial" que no se sabe si se materializará. Empecé a organizar mis piedras, perlas, cristales... No quiero comprar más materiales, si es posible, quiero utilizar los muchos que ya tengo. Lo que me pareció una labor tediosa y aburrida se convirtió en "lentejas". Según separaba los peridotos de las carnelias, las perlas de las amatistas, la sucia plata de los cristales; llegué a momentos de puro éxtasis. Las caras y caretas de muchos de ustedes venían a mi memoria: las suposiciones, los deseos, las esperanzas y desilusiones surgían de mis humildes piedras según las categorizaba y las metía en su bolsita de plástico. Hasta tal punto me encuentro atrapada en esta tela de araña que no sé cuándo cada caja volverá a su estante. Tampoco sé si estas ágatas lucirán en el escote de una extraña algún día... Por ahora sólo quiero seguir organizando mis lentejas y disfrutando de lugares fantásticos donde nunca llegaré.
Como colofón a este recuerdo quiero añadir que pasé poco más de un año en un internado del Estado - a principios de los sesenta - en contra de los deseos de mi abuela. Allí comíamos muchas lentejas. A diferencia de las otras chicas, yo las comía separando las robustas de las endebles, por lo cual fui castigada por las monjas que se asombraban de mis 'remilgos'. Buena lección la que aprendí... ahora cada día me siento más y más una lenteja desechable. Menos sueños y más realidad. Así debe ser.
32 comentarios:
Las monjas han sido malas y remalas de toda la vida de Dios, o sea que, nada de remilgos, que tú habías sido muy bien enseñada por tu abuelita.
En cuanto a que El Capitan Trueno fuera un cuento de hadas... eso ya es mucho decir. Y ¿su novia no se llamaba Sigrid? No, es posible que ten gas tú razón y fuera Ingrid, pero, de pronto, me sonaba más Sigrid. No sé... lenteja aviruelada, jejejejej
Elvi, todavía despierta? Efectivamente, citaba de memoria y sabía que me traicionaba, no es Ingrid sino Sigrid. Claro, el Capitán Trueno no era un tebeo de hadas, eran los tebeos de mi hermano...me refería a 'otros'.
Gracias, lo corregiré, siempre puedo contar contigo, no fallas.
mi hermana no quere lentetas porque tienen gorgotos.
yo los veia flotar pero no tenia remilgos.
Incluso los contaba,los separaba,este es más gordete...
Miguel, "gorgotos" se llaman esas verruguillas? Será en Burgos, algún nombre deben tener. Oye, te perdono el deletreo por las altas horas de la madrugada en que escribías. Insomnio?
Bonitas fotos, ya han pasado por aquí antes. Gracias!
Gorgojo de la lenteja (Bruchus sp.): hay varias especies que atacan a la lenteja como el B. Lentis y el B. Signaticornis, efectuando la puesta sobre las legumbres en el campo y penetrando las larvas en el interior de los granos.
Con los granos van los insectos al granero de donde salen de nuevo los adultos en primavera y se dirigen otra vez al campo.
En fin, Miguel, cada uno buscando su bollo...Ya, ya veo que te gusta maldeletrear. Si una cosa tenemos en común - y no es poco - es que nos moriremos siendo niños...Los demás nos llamaran seniles!
Todas esas cajitas Estrella!!!!!!!
Qué deleite agrupar y clasificar beads. Y esa en U para ir viendo cómo queda el collar, supongo.
Las ágatas soon un pedazo de cielo con las olas del mar. Son trozos de planeta, como la arcilla, millones de años recorridos.
Lo de l impiar las lentejas ya se ha perdido, porque ahora lo hacen industrialmente, sin "gorgojos"; pero la viñeta es bien cierta y dice mucho más de nuestra historia que otros datos... Eso sí, el considerarse lenteja desechada que dice la autora del blog es una imagen algo atrevida, aunque sugerente.
Y a mí, finalmente, me gustaría tener un collar de esas piedras, para colgarlo alrdedor del espejo del baño, de uno peqqueño.
Amalia, tenías que ser tú la que te fijaras en las piedras. No comprendo cómo se le han escapado a Miguel, pintor y arqueólogo...
La U está muy bien para collares cortos y sencillos. Para lo que yo pienso hacer con las ágatas sólo me sirve de contenedor. De momento estoy disfrutando viendo como me esperan pacientemente.
Qué pasó con mi dama? Está de camino?
Amalia, Tienes que anunciar en tu web que se aceptan pedidos de otros países.
Pingüino, algún día tengo que ver ese espejo para saber qué le va. No crea usted que yo hago collares para cualquier espejo que me lo pida.
A mi edad todos empezamos a ser desechables. Unos más que otros, claro.
No se me escapó.
Así como me contestó en esta carta
Dear Miguel,I am just back from some weeks away (doing field work) and your little parcel was here. many thanks! appreciate thye stones and the wonderful image of Alaejos (Valladolid) It is VERY different from Wellington N.Z.!!Cheers and best wishes, Hamish
Te mando estas dos antipódicas que tengo en mis manos de Trujillo(granito)y de Kaponga(volcánica)
http://www.chuty.net/galeria/pozo/web/inicio.htm
Esas lentejas azules, irisadas y dibujadas de olas de mar en sueños me despiertan la codicia, Chiqui. Pero aún no puedo. Llegará el día, estoy segura, en nque pueda decirte: hazme un collar que a ti te guste mucho. Sí, llegará, sí; estoy segura, lentejuela abandonadita.
Miguel, no entiendo la carta. El chuty es un tipo interesante y tus dos piedras muy hermosas.
Uy! yo creía que no llevabas collares si no ya te habría regalado uno. Este color te iría de perlas, Elvi... aunque son ágatas.
Chiqui no te creas que me resulta fácil despedirme de la dama...
Tengo pánico de los avatares del correo, y estuve buscando una caja bien fuerte. Ya la tengo, ahora toca embalarla con mil cuidados y mandarla a volar hacia ti.
Tennos al tanto de la evolución del collar de ágatas.
Amalia, no sabes cómo te entiendo. Tengo collares que ni los he enseñado a las amigas, y sé que los tendría que vender. No me los pongo - no soy de colgarme mucho - aun así siempre pienso que nunca volveré a encontrar piedras tan raras o bellas. Otra cosa es que la gente no los apreciaría como lo hago yo... Su valor no es monetario sino sentimental.
Muchos collares me gustaría recuperar, y no, no es avaricia.
Dices... No comprendo cómo se le han escapado a Miguel,
Y repito que no se me escapó,he visto tambien la colección en Tú pag.web
Yo tambien ando con piedras, aunque no sean preciosas. Y alguna de ellas he mandado al geólogo del museo de Wellington.que está en las antípodas de Alaejos.
¿Quieres que te mande algunas?
Miguel, quería picarte para que te tomaras en serio mi entrada. Ya ves, lo he conseguido. Cómo que si quiero que me mandes piedras? Cómo te diría que no? Elige una, me encantaría tenerla. Te mando la dirección por email.
Esa página Web está anticuada, todo vendido. He perdido la información para poder entrar y modificarla. En cuanto tenga tiempo la voy a quitar y armar otra nueva.
http://www.google.es/imgres?imgurl=http://www.artespain.com/wp-content/uploads/Suiseki-el-arte-de-las-rocas2.jpg&imgrefurl=http://www.artespain.com/01-06-2010/escultura/suiseki-el-arte-de-las-rocas&usg=__BMpdkMm61eEg99pYdioJVKiCHF0=&h=273&w=580&sz=41&hl=es&start=4&sig2=35qajw2QRQJmwVdB5TKeSA&um=1&itbs=1&tbnid=91uUpEARgvmgFM:&tbnh=63&tbnw=134&prev=/images%3Fq%3Dsuiseki%2Bfotos%26um%3D1%26hl%3Des%26sa%3DN%26rlz%3D1T4HPEB_esES245ES246%26tbs%3Disch:1&ei=qh9nTI_sH8f_4AaEubWZBA
Ya veo que me he pasado de rosca. Si al menos supiera hacer lo que hace Miguel...
Bueno, Elvi, pero se abre muy bien el enlace. Los ejemplos que hay en esa página son un poco fúnebres, no?
Te mando estas dos graciosas que tengo en la estantería... al alcance de la mano. Una me la traje del patio del Teular (con vuestro permiso) la reconocerás enseguida; la otra la encontré en la playa. También serán de interés para Miguel y Amalia...y muchos de ustedes que nos siguen.
http://www.flickr.com/photos/21126237@N03/4892834152/
Otra piedra de interes:
El post de Javier Rioyo les va a divertir. Atribuye a mi blog , a una entrada en particular: "Leda y el Cisne", de Leda Schiavo, la influencia de ir por las playas nudistas mirando c----. En cuanto abrí su página y vi la foto me eché a temblar.
http://www.elboomeran.com/blog/8/blog-de-javier-rioyo/
Y el enlace a aquella entrada. Disfruten, otra vez, del ingenio de Leda. Para los nuevos les recomiendo que la busquen en mi blog porque todo lo que tiene es único, como ella.
http://chiquitin52.blogspot.com/2010/01/parejas-leda-y-el-cisne-leda-schiavo.html
Chiqui, esto va a la deriva. Ya era atrevida la conexion de lentejas y piedras preciosas perote salio muy bien.
Es la primera vez que leo a Rioyo, ya sabes que no tenemos playas nudista, deben ser un paraiso para los viejos verdes.
Si, querido Tex, los jóvenes de hoy no necesitáis ir a esas playas. Otra cosa es los que viajaron a Francia para ver "El último tango en Paris".
Lo que es una gozada es bañarse en bolinguis en un río de montaña. Todo tu ser encoge y estalla a la vez. Ni cisne necesitas.
Chiqui, lo que me he reido con los "Gustos pubicos"de Rioyo... Que razon tiene en eso de que las modas pelunas llegan hasta los rincones mas insospechados!!
Sin ir mas lejos, hace cuestion de 4 meses cuando fui a quitarme las mechas esas rubias que tu detestabas, vi en el mostrador del salon de belleza unas tarjetitas que ofrecian disenarte nombres y figuras varias ahi abajo... Jejejeje.
ESTE BLOG está subiendo de tono, y no sé si estoy preparado para ello, porque yo escribo desde España y me crié en la época del generalísimo y vi el tango de París y compraba Lui en Francia, y cosas así.
Podrías hacerme el collar para encima de la mesa, que es de madera noble, marquetería, y lo utilizaría como paginador.
Lleva razón el pingüino y tex, esto se está disparando: baños desnudos en las aguas frías de un rio ( qué rio es ese, Elvi?) Filoloca mandándonos a la pubiquería (la de córdoba o la de Boston?)... Voy a ver si os paro antes de que me empiece a llegar al email más basura de la que ya llega.
Eso me pasa por daros de comer lentejas. Ya decía mi abuela: "niña, que tienen mucho hierro".
Como paginador? Pinguino tu lo que quieres es un rosario...
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