viernes, mayo 18, 2007

Graciela Reyes: LAS GRANDES CIUDADES

Acabo de regresar de un viaje a Nueva York. La mujer que iba sentada a mi lado en el avión, que leía la misma revista que yo (The New Yorker), me preguntó de dónde era. A veces me lo preguntan antes de que abra la boca, o sea, antes de notar mi acento extranjero, que tampoco identifican nunca; debo confesar que según la cara del que me pregunta digo que soy griega, pakistaní, turca, israelí, palestina, paraguaya y hasta noruega. Lo que suena más exótico es “paraguaya”. En Buenos Aires nadie cometería el error de preguntarme de dónde soy, pero casi todos cometen el acierto de comentar “¿usted vive afuera, no?” “Afuera” significa ‘en el extranjero’. Me explican que tengo un aire extranjero, aunque hable como porteña.. Es que soy extranjera. Cuando era una infante, me gustaba ir de brazo en brazo; en la niñez, de casa en casa; en la juventud, de café en café. Todos los lugares me atraían, y en cuanto pude tomé un avión sin pasaje de vuelta. En parte tuve que hacerlo a la fuerza, si quería seguir estudiando lingüística, pero yo había decidido hacía mucho que iba a vivir en otras ciudades.

En ciudades grandes, en verdaderas ciudades, solamente. Una verdadera ciudad es grande y más bien sucia, por el trajinar continuo de la gente, tiene barrios muy diferentes entre sí, mucha agitación, ruidos insoportables, bares, tiendas, cines, borrachos, parques maravillosos donde no conviene entrar de noche, túneles, escaleras, amplias avenidas (recuerdo un verso cursi de mi profesor Guillermo de Torre: “Madrid, ábreme los escotes de tus avenidas”), hoteles de lujo, hoteles familiares, hoteles de mala muerte, estaciones de tren, un subterráneo que abarca todas las calles, como una araña gigantesca, y puerto, puerto y ratas y marineros. Nací al lado del puerto, escuchando las sirenas de los transatlánticos. Las ciudades grandes, las que me gustan, tienen rascacielos, terrazas llenas de gente, galerías de arte, museos, ópera, varias universidades, noches plácidas en barrios tranquilos, noches que nunca duermen en barrios de juerga. Tienen olores, muchos olores. Buenos Aires despide un inolvidable olor a agua podrida, que ahora se nota menos que antes, porque han construido mucho sobre el río. Chicago tiene olor a gaviotas, a viento, y, en invierno, a hielo; Madrid tiene olor a pinos y a romero, en sus mejores días; Nueva York tiene olor a comidas exóticas, a ajo, a mar y a ostras, a plástico y a perfumes de lujo. Conozco otras ciudades, pero no las he vivido, aunque a veces he pasado semanas o hasta meses en Barcelona, en París o en Venecia, y he bajado a comprar el pan por la mañana. Pero yo considero que vivir en una ciudad es trabajar en ella, o al menos buscar trabajo en ella. Todo lo demás es turismo, y el turismo no permite conocer las ciudades, es nada más que un abrazo con la ropa puesta.

Madrid fue la primera ciudad extranjera en que me establecí para vivir, o sea para estudiar y buscar trabajo y morirme de hambre si era necesario, sin contárselo a mis padres, que me hubieran mandado una vaca por correo, en la mejor tradición de la burguesía argentina, que viajaba por Europa con su vaca. En el año 1973, cuando llegué, Madrid no era todavía una gran ciudad, al menos comparada con Buenos Aires. Me di cuenta de que podía ir andando a casi todas partes, y eso me desilusionó un poco. Encima, Franco. Mis profesores en la Universidad de Buenos Aires (el ya mentado don Guillermo, Claudio Sánchez Albornoz, Manuel Lamana, y hasta el médico que atendía a mi familia, el doctor Isidro Vahamonde) me habían hablado ya del franquismo. El cura vasco con el que yo me confesaba en los años inocentes, me decía cuando me daba la absolución, “Recuerda, niña, que viva la República y que muera Franco”. A causa de eso mis padres me explicaron la guerra civil cuando yo tenía seis años. Pero en Madrid encontré el Ateneo, y allí estaba a mis anchas. Recuerdo la biblioteca ardiente, recuerdo que se me pegaba el cuerpo al sillón de cuero, y recuerdo las ventanas que daban a un patio, y los vencejos enloquecidos. Yo leía ávidamente y era feliz.

De mi primer año en Madrid, ahora que han pasado más de treinta, recuerdo ante todo el Ateneo y los vencejos, los libros y revistas que yo leía buscando un campo de estudio dentro de la lingüística (lo encontré), el olor a frito maravilloso de los patios de las casas, y recuerdo que me moría de hambre. Perdí diez kilos en unos meses, y me ataba los pantalones con una cuerdita. Se me hizo un hoyo en la punta de la nariz, de tan flaca que estaba. Pero el hambre no me desanimaba en absoluto. Estaba enamorada, estudiaba, era totalmente feliz, aunque hambrienta. Un día me metí en el bolso el tarrito de mostaza que siempre había en las cafeterías. Me lo comí con pan, pensando en el Lazarillo de Tormes, divertida. Cuando me pagaron mi primera traducción en la editorial Gredos, me dieron más de lo prometido (exactamente 162 pesetas por página, en lugar de 90 pesetas), porque les gustó el trabajo, y yo salí de allí súbitamente rica. Tenía un montón de billetes en la cartera, pero en lugar de irme a mi casa y compartir mi alegría y el dinero, me tomé un autobús hasta la Gran Vía, entré en uno de esos bares de tapas que tienen todos los mariscos expuestos en los escaparates, y me di un atracón.

Nunca pude, sin embargo, pese a la generosidad de la editorial Gredos, comprar comida suficiente, ni yo ni mi novio, que estaba en las mismas, ni mis queridas amigas argentinas, que ni siquiera tenían la editorial Gredos. Compartíamos dos naranjas entre cuatro, y yo soñaba con los quesos, pero me limitaba a tocarlos en el supermercado, a ver si estaban bien estacionados, e irme sin comprar ni un pedacito. En Buenos Aires, aunque era una hija mimada, tampoco tenía dinero a mi disposición, y trabajaba muchas horas para poder comprarme libros. Yo estaba acostumbrada a desear, y las ciudades son para mí lugares de deseo, porque todo está allí, expuesto como los mariscos aquellos, fuera de mi alcance. De esto resulta que para mí una ciudad, una verdadera ciudad, tiene que hacerme desear mucho, o no es una gran ciudad. Tiene que superar mis fantasías, tiene que ofrecerme más de lo que yo puedo imaginar. Es un requisito. Acabo de verificarlo en este viaje a Nueva York. En las ciudades, y más que ninguna en Nueva York, están los centros de poder y de éxito, en las librerías los libros que acaban de salir y ya son famosos, en las galerías de arte objetos nunca vistos. Las tendencias, las modas y los gustos se hacen por la calle. Los hermosos y los famosos se mezclan con los borrachos y los destruidos, el lujo convive con la peor miseria, y la vida con la muerte, a cada instante. Todo a la vista. Las ciudades captan, modifican y comercian la imaginación humana, y la ofrecen bajo muchas manifestaciones, algunas fascinantes e inalcanzables. En las ciudades se aprenden nuevos deseos, se vive mirando y chocando, sufriendo y descubriendo, reaccionando a miles de estímulos. En las ciudades se conoce mejor la soledad.

Hay que desear, para mantener la ilusión de un futuro. Cumplí algunos de mis deseos. En Buenos Aires aprendí la euforia de esperar siempre algo, la sumisión del estudio, el placer de la amistad y los sueños compartidos. En Madrid escribí mis primeros libros y conocí maestros y amigos que cambiaron mi vida. En Chicago, la ciudad más esquiva y difícil para mí, recibí el estímulo necesario para ir descubriendo mis verdaderas vocaciones, y ahora me siento en casa. Me siento en casa en las ciudades, porque me siento en casa en el deseo, en el barullo de la vida, en la diversidad de la gente, de la comida, de las lenguas. En realidad no soy de ninguna parte sino de esta fascinación, y por eso puedo seguir agregando ciudades y viviéndolas plenamente, como una verdadera extranjera, que está atenta a todo, que mira con ojos siempre sorprendidos, que se siente de paso por la vida y por los afanes de la vida, pero apasionadamente de paso.

GRACIELA REYES

41 comentarios:

Anónimo dijo...

es una lástima que comente yo la primera, será esta manía mía de madrugar. pero qué le vamos a hacer: he leido tu texto Graciela, y me ha emocionado y lo digo en serio. mi admiración más sincera. me acabo de dar cuenta de que nunca he pasado hambre y de que no deseo. gracias. besos

Anónimo dijo...

Hasta el 19 de agosto se puede contemplar en la Hayward Gallery (Londres) el trabajo de uno de los escultores más afamados de la actualidad, el londinense Antony Gormley, cuya obra más conocida se trate probablemente de Angel of the North (Gateshead, 1998).

La muestra acoge tanto esculturas diseñadas para su ubicación en el propio centro de arte como otras que representan su trabajo en la tres últimas décadas, enfocadas generalmente hacia el cuerpo humano y las relaciones entre éste y el entorno. La instalación va más allá de la galería y se extiende en un área de la ciudad de mil quinientos metros cuadrados

Anónimo dijo...

Todos los años el Departamento de Estado realiza un sorteo para repartir permisos de residencia.
No pueden presentarse colombianos, dominicanos, mexicanos y salvadoreños.
Este año han concedido el derecho a solicitarlo a 82.000 personas, aunque sólo 50.000 lo conseguirán.
El reparto de visados puede llegar a convertirse en un verdadero concurso en Estados Unidos. Este año hay 97 españoles entre los afortunados.


La política de inmigración aplicada por el Departamento de Estado tiene todos los ingredientes:

El premio: el permiso de residencia en Estados Unidos, tanto para el ganador, como para sus cónyuges y sus hijos.
Los concursantes: millones de personas anhelantes de poder realizar el 'sueño americano'. En total 5,5 millones de personas enviaron sus solicitudes correctamente entre octubre y diciembre.
Requisitos: Provenir de un país en el que no se emigre demasiado a Estados Unidos, haber terminado la educación secundaria o contar con dos años de experiencia laboral en un trabajo que requiera al menos dos años de entrenamiento.
Quedan fuera colombianos, dominicanos, mexicanos y salvadoreños, por considerar que provienen de un país de alta inmigración.
Sorpresas: De las 82.000 personas a las que se les ha comunicado su derecho a solicitar la residencia, sólo 50.000 la conseguirán. La Administración se reserva esta sorpresa ya que estima que muchos de 'los ganadores' no formalizarán su solicitud.
¿Cómo ganar el concurso?


Como en todo concurso que se precie, la velocidad es bien valorada, así que si hay más solicitudes de las permitidas, los que envíen tarde los formularios se quedarán con la miel en la boca, por lo que el Departamento de Estado instó a los agraciados a realizar los trámites "rápidamente".


And the winner is...

El país con más agraciados es Nigeria, con 9.849, seguido por Egipto, con 7.229, y Etiopía, con 6.871.

En América Latina, ganaron 1.274 peruanos, 488 brasileños, 427 cubanos, 226 venezolanos, 170 ecuatorianos, 88 bolivianos, 86 argentinos, 43 guatemaltecos, 42 chilenos, 28 hondureños, 20 paraguayos, 19 nicaragüenses, 18 costarricenses, 14 panameños y 4 uruguayos.

Españoles pocos: sólo 97 podrán vivir en el país de las oportunidades.

Anónimo dijo...

2 apuntes rápidos:

- Manhattan de Woody Allen con música de Gershwin: http://www.youtube.com/watch?v=d3YaIpiWsKA

- Santiago Calatrava en NY

http://atuleirus.weblog.com.pt/arquivo/south_street_tower_04.jpg
http://www.willisms.com/archives/spire.gif

leeré mañana cómo lo has pasado, chiqui. sdos a todos

estrella dijo...

Querida Graciela. Creía que me sabía toda tu historia pero algunas cosas salieron por ahí que no conocía.
Tú y yo vamos buscando cosas distintas de las ciudades, pero da igual, somos de ciudad.

Tendré que entrar en el blog mañana. Ayer estuve de comunión y llegué muy tarde a casa. Esta mañana me levanté para encontrarme que se me ha terminado la conexión con el Internet. Me dejé el ordenador conectado sin darme cuenta. Tendré que comprar otra… Estoy de visita y no quiero abusar! Un beso y gracias por este manjar.

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=k8HsEbb-9sA

Unknown dijo...

Comparto la admiración de Hanako por Graciella.

Tanto la forma de narrar como el contenido emocionan. Cuando algo escrito sencillamente trasmite tanto y tan bien es muy de agradecer, tan distinto a lo que hacen los escritores tan de moda ahora que se regodean en el engolamiento y la autocomplacencia.

Y se nota que eres una verdadera viajera, te empapas de lo que ves, penetras en los entresijos de las ciudades y valoras positivamente la diversidad. Muchos deberían aprender de tí, es una pena la cantidad de gente que se apoltrona en su medio, en su casa y en su círculo y todo lo de fuera es juzgado sin conocerlo, demasiado a la ligera.

Así que repito: Comparto la admiración por Graciella

Anónimo dijo...

Otra escapadita (estoy entre buenos amigos) Prozac, es obvio: ¿contra quién va ese elogio? Ya sé que no va contra mí...Graciela, salvando las distancias...y yo tenemos la sencillez en común. Tu elogio es demasiado fuerte para no estar pensando en alguien en concreto...no quiero nombres...dejémoslo así

Anónimo dijo...

Comparto la admiración por el texto de Graciella pero no me emociona, porque yo detesto las grandes ciudades. Lo que hay en las ciudades es hambre y barbarie, explotación de los débiles, desprecio por los diferentes, mentiras y boato de los políticos y la vanidad y la frivolidad de los famosos. Allí está lo peor de la humanidad, no lo mejor. En Madrid la gente es insoportable, son como porteras: saben todo de cualquier tema, hablan (gritan) por los codos, y se meten en lo que no les importa. Los vecinos hacen ruidos a cualquier hora de la noche, sus niños son maleducados, los coches nos ahogan, la polución nos enferma.

Lo único emocionante en la historia de Graciela es lo que tiene de autobiográfico, y el humor con que lo cuenta, pero no habéis notado que cuenta una lucha difícil, contra el hambre y la incertidumbre. La guiaba una vocación muy fuerte, si no la hubiera tenido habría sucumbido.

No es mi deseo ser negativo, sino tratar de expresar algo. He notado que los blogs (los famosos) son como reuniones de pavos reales que lucen sus colas de colores, alguna locaza que los pone nerviosos, y los tontos de siempre. Teniais tambien una locaza, pero muy civilizada, y espero que vuelva. En este blog hay, en los últimos al menos, que son los que he mirado, menos deseo de lucirse y más de dialogar y de participar. Si me aceptáis, me quedo un poco más.

Anónimo dijo...

Jorge. Ahora estoy con mi familia y puedo usar el ordenador un poquito más relajada, hasta que mañana recargue la dichosa tarjetita.
El blog anda más relajado porque la responsable de mantenerlo soy yo y estoy, bueno no de vacaciones realmente, pero en Madrid.
Estoy de acuerdo contigo en cuanto a las grandes ciudades...pero mejor morir en Madrid que en NY, no crees? Graciela te contestará. Estoy segura. Sólo quería darte la bienvenida al blog. Sé que los demás, que entran y salen, también lo harán. No sé a que "locaza" te refieres. Echo de menos a todo el que ha pasado por aquí, en esta segunda edición del blog o en la primera. Ojala volvieran todos, pero este medio es muy volátil y todos tenemos nuestros problemas y responsabilidades a las que atender. CHIQUI

Unknown dijo...

Chiqui, por supuesto que mi elogio va para Graciela. Y mi aversión a los escritores engolados (el contra-elogio que llamas tu) claro que no te incluye, pensaba en algunos de mis autores favoritos que se han contaminado con esa tendencia y ahora no los aguanto. En fin, será que esa evolución es la buena y la desfasada soy yo.

Jorge este blog tiene a veces entradas muy buenas, y lo mejor es que son de gente que se pasa a dejar una opinión sin ánimo de epatar. Yo es que estoy harta de los que "mean colonia".

Tu contravisión de la ciudad a Graciella me ha gustado mucho. Todos los puntos de vista tienen su aquel. Yo soy de asfalto cien por cien. Hasta para estar sola, cosa que a veces me encanta, me quedo en la ciudad, me siento a gusto en la soledad de la ciudad, pero me espanta la soledad del campo, es mucho más descarnada.

Bienvenido

Anónimo dijo...

Hola amigos.
De pronto me han entrado ganas de pasar a saludar y aqui estoy.
No estoy muy seguro de quien anda por aquí de la vieja guardia, pero no veo yo la chispa absurda y un tanto caótica que animaba aquellas memorables noches ¡Estáis de un formalito!
Yo también he cambiado. Tengo una original okupa viviendo en mi casa que hace de mi vida un delicioso calvario. Hanako-Zenobia, como me diste calabazas...pero es que no es comparable un devaneo virtual con el torbellino que tengo ahora.
Saludos a todos, guardo buen recuerdo de aquellos días donde compartí mi soledad con un grupo de piraos que se iban de viaje a exóticos paraisos y aullaban a la luna. ¿Y aquella desgraciada criatura que tanto me gustaba sigue lamentándose o tampoco ha vuelto?
Me voy por mi chica.
Un abrazo a todos

estrella dijo...

OYE CANCER, no te líes con una chica que no te deje tiempo para pasarlo bien, virtualmente me refiero, mal negocio que las mujeres aten al marido a la pata de la cama y no los dejen usar el ordenador. No sabes lo que te hemos echado de menos!

Sí esos eran los tiempos en que Otto coqueteaba con Zenobia y Joaquinita nos daba clases de aullidos, y Necko (se escribía así, dime tu Neco, sé que nos lees, imposible que no lo hagas) nos traía las poesías de Pessoa, y Francis, que reconfortante era que se acercara todas las mañanas para decirnos que tenía un blog nuevo.
La Criatura entra de vez en cuando, Espejismo también.Zombi hace tiempo que no pasa por aqui. Ahora me amenazan con robarme a Graciela, pero yo sé que ésa es de ley y nunca me dejaría...los otros, como tú, se buscan una chica y vuelven cuando la chavala los deja o les da la lata...vaya como mis hijos...así andamos. Besos hombre.

Anónimo dijo...

Jorge, bienvenido. Yo creo que Graciella no niega lo horrible de las ciudades: Dice por ejemplo: "ruidos insoportables", "olor a podrido proveniente del río", "miseria", muerte". Ella dice es que todo está mezclado ante nuestros ojos: la miseria de la humanidad, su frivolidad, su genialidad, su fragilidad, todo junto. A los escritores les interesa lo humano, viajan y observan, se sumergen, a veces se vuelven depravados (no digo esto por Graciella, que solamente llegó a robar un poco de mostaza), y las grandes ciudades son muy estimulantes.

Si tú eres impaciente, neurótico y atrabiliario como yo, haremos buenas migas. Pero yo vivo en la ciudad por razones de trabajo, sabes, mi trabajo es pensar la ciencia, todavía estoy creando la ciencia, y tengo a mis fellows de la Royal Society a dos pasos. Ser filósofo requiere conversación con los pares y con los impares.

Mi tarea actual es determinar qué nos hace diferentes de los demás grandes monos. Hasta hace poco se decía que el lenguaje, pero ya no estamos tan seguros. Es un tema que me consume los sesos, os aseguro. Lo más difícil es hacer experimentos para verificar si algunos animales tienen o no tienen consciencia. Os contaré más. Ya es la hora de mi Scotch con una dama. La Luna anoche estaba en Venus, y la dama quiere volver a verla esta noche conmigo.

estrella dijo...

PERO BUENO...que lista me he vuelto. Descubrí (leyendo las instrucciones, cosa que nunca hago) que la tarjetita se puede recargar por teléfono. Pues si que está España adelantada!

estrella dijo...

FRANCIS. Tú, la luna y tu amiguita sois unos frescos... no nos vengas con los cuentos de tus “ fellows de la Royal Society”.Scotch!!Lo más cercano que tengo en casa a un refrigerio es un racimo de uvas! Esto me hace recordar el paquete de puré de patatas de Hanako. Qué extraño que no se haya pasado por aquí!
Corran las cortinas, descarados!
Buenas noches a todos.

Anónimo dijo...

vaya, os soltáis cuando no estoy, tenemos diferentes horarios me temo. he leído rápido, más bien escaneado y seguro que después se me irán ocurriendo más cosas:

cancer, me alegro mucho de leerte, ya ves por aquí andamos. destaco tu frase "Hanako-Zenobia, como me diste calabazas...pero es que no es comparable un devaneo virtual con el torbellino que tengo ahora."... chico, me alegro por tí, donde esté una relación real que se quite lo virtual, no? ya ves, te di calabazas, y yo dejé que mi corazón cybernético se lo llevaran, por cierto que no me han dicho si se lo quedaron o me lo devolvieron. da igual, me he acostrumbrado a no tenerlo a mano y lo he cambiado por el humor y la ironía.

así en voz baja, has hecho bien, yo te hubiera defraudado. bsos

Anónimo dijo...

estoy de acuerdo con lo de los defectos de las grandes ciudades y todo eso... lo que me emocionó del texto de Graciela fue su pasión, su capacidad de asombro y su deseo en los lugares y ciudades que ha conocido. me parece admirable. bsos

estrella dijo...

HANAKO.No sería Mukamari o kumaraki? Lo trataste muy mal.
Si no fue ése, dímelo al oído...a mi solita, me encanta unir a las parejas. Cómo dejaste que te lo quitaran? Me tendrías que haber avisado y algo habríamos hecho para retenerlo. Animo, cómo va esa alergia?

Anónimo dijo...

jajaja chiqui, vas a tener que tirar de blogoteca: o tienes mala memoria o me quieres tirar de la lengua, jajaja. puntualicemos:

- no traté mal a Murakami, busca busca
- al que le dí mi corazón cybernético ya no está, asi que da igual

de la alergia: bien tirando, depende del día. gracias por preguntar. bsos

Anónimo dijo...

umm puestos a recordar, echo de menos a chowmixtos...

Francis Bacon, me tiene usted intrigada con su experimento para "verificar si algunos animales tienen o no tienen consciencia." espero que nos tenga al tanto de sus avances.

ah que hay uno nuevo! jorge, bienvenido.

Anónimo dijo...

de todas formas de lo que dije, lo más importante es lo que has obviado, chiqui: "da igual, me he acostrumbrado a no tenerlo a mano y lo he cambiado por el humor y la ironía."

humor por siempre y para siempre, y que no falte! me voy a dormir. bsos

Unknown dijo...

¿Consciencia o conciencia, Francis? ¡No es lo mismo!
Lo que si tienen es una tolerancia mucho mayor al dolor porque no le añaden el componente psicológico del humano.
Yo también me voy a la cama, que mañana desgraciadamente es lunes.

estrella dijo...

Tonta HANAKO, no lo he olvidado. Cómo lo iba a olvidar...pero no lo quería descubrir.
Oye, quizás yo tuve la culpa...ya sabes, tengo esos prontos...También mi ironía es interpretada la mayoría de las veces como sarcasmo...Cómo se dice Jorge en catalán?

No te referirás a Otto, a ese lo queríamos todas.
Ah, Matemático! Muy joven para mi pero… seriamos buenos amigos....caliente o fría??? Dame una pista.

Anónimo dijo...

que no, que no, chiqui que no quiero volver a jugar a este juego... siento haberlo mencionado: es culpa mía y mi falta de control cuando bromeo, al final me paso.

siento el malentendido, y espero que me disculpen los nombrados esta tontería. todo está bien y lo del corazón cybernético es una ñoñería que ni existe ni tengo ni quiero... perdón!! siempre me tengo que disculpar. es que soy como soy, no puedo evitarlo.

chiqui: gracias, buscaremos otro juego más divertido, seguro. buenas noches. bsos

Anónimo dijo...

Gracias, Francis Bacon. Encuentro hoy estas antiguas palabras tuyas, escritas hace siglos, en tu inglés nativo, donde nos cuentas las cosas que debemos ver en las ciudades y en los viajes. Con los años han cambiado tus intereses, no tu sintaxis.
“The things to be seen and observed are: the courts of princes, especially when they give audience to ambassadors; the courts of justice, while they sit and hear causes [...] the churches and monasteries, with the monuments which are therein extant; the walls and fortifications of cities, and towns, and so the heavens and harbors; antiquities and ruins; libraries; colleges, disputations, and lectures, where any are; shipping and navies; houses and gardens of state and pleasure, near great cities; armories; arsenals; magazines; exchanges; burses; warehouses; exercises of horsemanship, fencing, training of soldiers, and the like; comedies, such whereunto the better sort of persons do resort; treasuries of jewels and robes; cabinets and rarities; and, to conclude,whatsoever is memorable... As for triumphs,masks, feasts, weddings, funerals, capital executions, and such shows, men need not to be put in mind of them; yet are they not to be neglected.”

estrella dijo...

POLIANTHEA. Gracias por tan interesante párrafo. Efectivamente, se lee con la misma agilidad que uno lee a Graciela, maestra del lenguaje. Cualidad rara en escritores del periodo de Francis Bacon.
Claro, lo sorprendente para mi no es lo que hemos cambiado sino como eran las cosas.Feliz hallazgo!

and, to conclude,whatsoever is memorable... As for triumphs,masks, feasts, weddings, funerals, capital executions, and such shows, men need not to be put in mind of them; yet are they not to be neglected.”

Anónimo dijo...

En efecto, nada debe ser descuidado, todo debe ser observado cuidadosamente en las maravillosas ciudades. Palianthea, el párrafo que citas tiene algunos siglos, pero soy el mismo, soy el mismo. Gracias por el recuerdo.

Amiga Hanako, qué gusto me da su pregunta sobre los animales y la consciencia. Se lo explicaré de la manera más simple posible, y le ruego que tenga la paciencia de leerlo, porque le interesará (me espanta su costumbre de escanear, como usted dice). Tener consciencia de nosotros mismos significa, ante todo, reconocernos, y tener responsabilidad de nuestros actos y además poder dar razones para justificar nuestros actos. Esta capacidad nos lleva a tener principios morales: a saber qué está bien y qué está mal, a ser altruistas, a sacrificarnos por otros si es necesario. Al parecer, consciencia y moralidad son atributos esencialmente humanos, pero los científicos no están de acuerdo con esto, porque algunos animales muestran comportamientos altruistas: los grandes monos y los insectos, por ejemplo. Hace un par de años un colega mío propuso una fórmula, rb – c>0. La fórmula, que es ya clásica en biología, indica que ciertos animales se ayudan unos a otros cuando el costo de hacerlo ( c) es menor que el beneficio (b) que va a obtener el animal que recibe la ayuda, y siempre que este comparta genes con el altruista (r, por ‘relación genética’). Dicho de otro modo, los animales altruistas ayudan a sus parientes más cercanos, siempre que el beneficio para el pariente sea mayor que el esfuerzo o riesgo de ayudarlo. Esto parece común a varias especies, incluidos los humanos, por supuesto.

Yo he trabajado toda mi vida para promover un nuevo tipo de filosofía, la filosofía experimental. En mi proyecto, no se trata de hacer conjeturas, sino de hacer hipótesis que se puedan probar, y probarlas experimentalmente. Así nació la ciencia moderna, que ya no se llama a sí misma “filosofía”. Si queremos demostrar que ciertos animales tienen consciencia y actúan moralmente, tendremos que demostrarlo. Para empezar, deberíamos saber lo más elemental: si se reconocen a sí mismos. Puede usted probar con un perro. Mánchele la cara con algo bien visible, y póngalo frente a un espejo. Si se reconoce a sí mismo, va a intentar quitarse la mancha, o va a sacudir la cabeza. Hasta ahora ninguno de mis perros se ha reconocido a sí mismo. Esto es muy interesante para los amantes de los perros, por cierto, porque indica que el perrito tampoco tiene noción de responsabilidad o de culpa, y cuando lo castigamos no tiene la menor idea de por qué lo castigamos. Si el perro mea (con su perdón) en la alfombra y le pegamos, evitará hacerlo otra vez porque asociará meada en alfombra con golpe, pero de ningún modo sabrá que lo que hizo está mal y que ha sido castigado. Los dueños de perro creen que sus perros son humanos y sienten vergüenza y arrepentimiento, pero no es así. Debo advertirle que mis colegas sostienen que hay perros que se reconocen a sí mismos en el espejo, muy pocos, pero los hay. También se reconocen los grandes monos y los delfines, que son capaces de sentir simpatía y de ser altruístas.

Los gorilas, orangutanes, y en especial los bonobos, que son unos monos cachondos que viven mejor que nosotros, son a veces altruistas, y tenemos muchas pruebas. Cuando un gorila derrota a otro en una pelea, no falta un macho piadoso que abraza al perdedor para consolarlo. A veces los enemigos se reconcilian, y se quitan las pulgas uno a otro en señal de amistad. Esta simpatía indica algo importante: que un gorila es capaz de saber lo que siente otro gorila, o sea, sabe que el otro gorila tiene tiene sentimientos y emociones como los suyos. Esta capacidad de adivinar lo que otro piensa o siente es un atributo importantísimo, y es algo que en el pasado se atribuía solamente a los humanos.

Pero es muy difícil diseñar experimentos que confirmen la suposición de que algunos animales tienen consciencia. A eso dedico mis días y casi todas mis noches, aunque Chiqui me llame fresco y me diga que corra las cortinas. No tengo cortinas, y no sé por qué me regañas, estimada Chiqui: mi moralidad es intachable, te lo aseguro, y te saludo con una reverencia.

Anónimo dijo...

gracias Francis Bacon, lo leeré esta noche con detenimiento (me enmendaré). Ahora solo he escaneado: es muy útil cuando no quieres o no puedes profundizar en un tema, pero siempre algo se queda: como por ejemplo su concepto de filosofía experimental. qué tiempos aquellos en que la filosofía y la ciencia iban de la mano y una intentaba comprender la realidad y otra le daba forma, la interpretaba. qué tiempos!! gracias

estrella dijo...

Señor Bacon, perdón pero estaba confundida con aquellas contorsiones ante la luna llena...En fin...que pierdo el hilo.

Yo le aconsejo que la próxima vez que tenga una respuesta tan larga la pongamos de entrada. Para estar seguros de que no lo escaneen...yo escaneo mucho, hasta a mi misma, así las faltas de ortografía que se escapan. También prometo, como Hanako, portarme mejor. Saludos caballero

Anónimo dijo...

Francis Bacon, quién es usted? Qué interesante lo que nos cuenta. Si le he entendido bien, todas las diferencias entre hombres y monos están cuestionadas. Quiere eso decir que no hay nada que sea intrínsecamente humano? Joder. Pero no somos iguales, no? Somos grados de lo mismo.

Y su afinidad con mi querida Graciela es también asombrosa.

Chiqui, no conozco a Graciela, por desgracia, aunque he leído su vida y he visto su foto. No voy a robártela, pero he copiado cosas suyas para divulgarlas en mis blogs. Somos libres en Internet, y yo soy muy respetuosa, si no te has dado cuenta.

Anónimo dijo...

Chiqui, GRANDE!

Londres huele a cerveza... :-(

Anónimo dijo...

Francis Bacon: le leí, y he de decirle lo primero que siempre es un placer que alguien te motive a leer y aprender algo nuevo. Sin explayarme demasiado, le comentaré brevemente en qué consiste lo del "escaneoç": forma de aprendizaje y lectura rápida basada en leer el titular, destacados y negritas en el texto para hacerse una idea aproximada de qué trata el texto. El contenido principal suele quedar bien entendido, pero se suelen perder los matices, que es donde suele estar el meollo de la cuestión. Lo que suele implicar una segunda o tercera lectura si consigue captar mi interés lo suficiente. En fin, recuerdo con tristeza los años en que era capaz de aprender y leer libros durante horas. Ahora, mi capacidad de concentración llega aproximadamente a la media hora. Después mi atención decae. Antes aprendía de los libros, ahora busco en google. Antes tenía curiosidad y tiempo, ahora escaneo. Gracias, por despertar mi mente, a veces se abotarga demasiado...

Me encantaría comentar su texto, debatirlo, confrontar experimentos en pro y en contra de su teoría, pero me temo que queda fuera del alcance de mi conocimiento científico, de mi experiencia (no tengo animales) y mi conocimiento filosófico al respecto. Lo que describe como comportamiento de algunos animales parece ser conductual: estímulo – respuesta – aprendizaje. Pero desconozco si los animales son o no altruistas. Me parece muy interesante esta línea de investigación para conocer mejor la condición humana y animal, aunque lo que realmente me interesa es cúal es el objeto de dicha investigación? qué fin persigue? Demostrar las diferencias o encontrar los paralelismos? determinar la condición animal del ser humano? Encuentro que algunas de los comportamientos humanos derivan del aprendizaje, del proceso de socialización y de la cultura. Creo que en esta línea se enmarcan también los estudios sobre el "buen salvaje".

Como le comentaba, he buscado cosas sobre usted y aunque me siento incapaz de profundizar en su pensamiento, he leído algo sobre su teoría de los idola. Algún día a lo mejor nos deleita con alguna disertación sobre el tema.

PD: podríamos tutearnos, pero en este caso me parece más adecuado el "usted", no todos los días una tiene la posibilidad de dialogar con un filósofo, es importante mantener las formas. Un saludo afectuoso

estrella dijo...

ASIER, déjate crecer el pelo antes de que te conozca algún
día!

Anónimo dijo...

Reflexionando sobre el tema, soy un poco lenta, me ha llamado la atención el concepto de altruismo que maneja: parece ser que solo se es altruista si la recompensa es mayor que el esfuerzo o si existe una relación de parentesco. supone acaso que el altruismo, como concepto está íntimamente relacionado con una suerte de utilitarismo, de egoísmo o conveniencia. Me devano los sesos buscando algún ejemplo de sacrificio a los demás que no esté relacionado con la religión o el parentesco. estoy en ello...

estrella dijo...

ISI, me dices, que quieres los textos de Graciela de mi blog:

"para divulgarlas en mis blogs. Somos libres en Internet, y yo soy muy respetuosa, si no te has dado cuenta."

Nada me encantaría más que se divulgara el trabajo de Graciela. Lo que manda a mi blog es, casi siempre, inédito; luego tiene otras cosas publicadas. En la conexión que hay en una de sus entradas puse su e-mail, te puedes poner en contacto con ella ¿ por qué no lo haces?
Lo único que me preocupa es que no nos das tu (ahora dices “tus”) blogs.
Nos gustaría verlos.

He tenido un caso aquí en que alguien colgó algo muy bueno y rastreando encontré que el texto no era de la persona que lo colgó sino de alguien conocido. Esa persona no le dio crédito al autor creando la impresión de que el texto era suyo.
No veo por qué no podemos tener acceso a tus blogs, siendo tan respetable (he oído esa frase antes!) También estarás de acuerdo que, personas muy respetables han ejecutado las mayores estafas de la historia. En resumidas cuentas: Yo no soy su agente, sí muy buena amiga y te aconsejo que te comuniques con ella. Es una persona muy accesible, aunque ocupada.
Entre tanto…te puedes llevar lo que quieras…espero que le des crédito.

Anónimo dijo...

El especialista en comportamiento animal posee un amplio conocimiento de la evolución, adaptación de las conductas instintivas o aprendidas dentro del mundo animal, lo que le permite comprender y facilitar la convivencia entre éste y los hombres.

Humans are animals with similar biological needs to other species. So why have we got art, cinema, sport, literature and philosophy?

Anónimo dijo...

muy interesante la bibliografía, la leeré (con tiempo, claro).

un vistazo rápido me ha llevado a la inteligencia artificial y al problema de la teoría de la incertidumbre del pensamiento humano: si los ordenadores serán capaces de pensar... hace tiempo sabía algo de eso, ahora es un vago recuerdo. gracias otra vez

bsos

Anónimo dijo...

chiqui, he visto que has estrenado nueva entrada... estás activa, eh? bueno, voy a intentar aguantar, me está entrando complejo con eso de estrenar y cerrar tus entradas. esperaré un poco a ver quién abre la boca. bsos

estrella dijo...

HANAKO, NO ROMPAS LA TRADICION!!!

Anónimo dijo...

hoy es uno de esos días lluviosos que invitan a quedarse en casa mirando por la ventana cómo cae la lluvia. a mí me gusta mojarme, aunque no hay cosa más incómoda que la lluvia en la ciudad... pero me gusta

qué cosas curiosas encuentras a veces: Groucho Marx cantando con Frank Sinatra

http://www.youtube.com/watch?v=YBvnxxigrIM

buenos días!!