lunes, mayo 12, 2014

Dia de las madres.

         Haber educado a los hijos sin que prestaran atención al calendario santoral, y menos al comercial, tiene ahora sus desventajas. Llegada a cierta edad, el día de las madres que parecía algo tan superfluo empieza a  hacer cosquillas en la maldita psique que lo registra todo. El padre manda a los hijos un correo recordándoles que  no se olviden  felicitar ‘a mamá’. En fin, que en esta familia de descreídos no seguimos las fechas fijadas por otros y--en resumidas cuentas--hasta se nos olvidan las que creamos nosotros mismos: cumpleaños, aniversarios . . .
           Pero ayer, un día hermosísimo para trabajar en el jardín--que lleva un retraso de semanas por  el  duro trato que ha recibido del invierno—conocí a Sandra. Al otro lado de mis pinos los vecinos han creado un pequeño oasis de plantas que no requieren sol. Primavera tras primavera he observado cómo trabajaba en silencio una mujer de origen oriental. No parecía querer conversación, ignoraba a los perrillos. Nunca me presenté. En este país no se sabe nunca si el vecino quiere ser vecino (ella pensaría lo mismo de nosotros). Ayer fue diferente: desde muy temprano se oía  una especie de gorgojeo en el patio vecino. No entendía lo que decían pero eran voces alegres, casi melodiosas. Tarde ya salí y una joven me saludó, desde la verja que nos separa y entre la espesura de los pinos, con un “hello!” tan amistoso que me hizo bajar del porche para hablar con ella. Sandra había venido a vestir de gala el jardín de su madre y con un guiño me indicó--cuando la madre se alejó--“el día de las madres”.  Alegre, comunicativa, nos informó sobre el edificio, su madre, los otros vecinos. Cuando oyó que tenía dos hijos, sin pensarlo se inclinó y cortó--de la que le había dicho era mi planta favorita--la rama más bella; luego siguió con los tulipanes y me los presentó con una hermosa sonrisa de “happy mothers day”. Sorprendida  y agradeciendo tan feliz encuentro le di las gracias. Luego me quedé pensando que el día de las madres quizás tenga sentido para la relación  hija-madre, los hijos, los maridos, compañeros, nunca sabrán de qué va la cosa. Lo entenderán, pero la experiencia seguirá siendo un secreto para el género masculino.

          Feliz día de las madres, y que sea los 365 días del año.



El que me felicita a diario es este copo de nieve que se me derrite poco a poco. Ahora hay que ponerle alfombra  en el porche para que descanse sus  cansadas patas traseras.









14 comentarios:

estrella dijo...

No olviden pinchar en las fotos, son espectaculares.

tu prima dijo...

Es cierto, prima. Las fotos son espectaculares.

Y las felicitaciones a demanda del interesado son estupendas para mentes despistadas, ja, ja. Y tan válidas como las espontáneas...

¡Más nos vale con la cabeza que tenemos!

tu prima dijo...

¡Ah! Y muchas felicidades. Eres una madre genial.

estrella dijo...

Gracias, hermosa. Quizás lo haya sido ya que mis hijos no me necesitan... Son muy independientes. Cuando me mueran no me echaran de menos, esa es la cuestión.


Elvi dijo...

Mamitaaaaa, siempre te echaremos de menos, siempre te querremos, ¡qué cosas dices Estrellita!
Oye, ¿cómo se llama esa plante de flores tan espectaculares? Me gustaría encontrarla para plantarla en mi jardín. Eso, si no se trata de una planta invasora, que no lo parece. La flora y fauna americanas son tan vigorosas que acaban con las autóctonas en Europa.

bleading heart dijo...

Elvi, si no me importa que no me recuerden, ni me voy a enterar! Las flores se llaman en inglés “bleading heart” ...Le habrían encantado a Bécquer. Juan Ramón, Salinas y Neruda, habrían sangrado por la nariz debido a la temperatura tropical (un disparate mío a ver si alguien los defiende) Dime si encuentras las semillas de esta planta porque si no te las llevo en un par de semanas. Feliz día de las madres, por esa hija tan dulce que tienes.
estrella

Ruggiero dijo...

Wow, Chiqui looks like a sultan on his magic carpet.

estrella dijo...

Ruggi. No te lo vas a creer, pero justo eso pensé yo cuando vi la foto.
Somos compatibles!!!

Elvi dijo...

¿En un par de semanas? Eso es retórica o va en serio. Quince días hacen la Feria del Libro. ¿Vienes? ¿Vienes? Qué guay. Yo intentaré dejarme caer por Madrí para entonces, primeros de junio. Tráeme esas semillas, por favor.
Esta vez sí que tenemos que vernos con más calma, aunque planeo una escapada a Toletum, claro. Tengo que ver a mis hermanitas.

Ada dijo...

Hola Estrella, hace un montón que no escribo, pero sigo leyéndote aquí, un poco rápido a veces.
Aprovecho para felicitarte como madre, y a las demás que por aquí pasen. Que tus hijos no te necesiten me parece un éxito educativo. En eso en parte consiste educar, creo yo, en dejar de ser necesarios.

En cuanto a lo que dices de la relación madre-hija, y el sentido del día de la madre, no sé muy bien qué pensar. En cualquier caso, tus vecinas lo celebraban con ganas, está claro, y eso es lo que importa. Un abrazo

estrella dijo...

Elvi, buscaré esas semillas...No sé por qué pero siempre pienso que la feria del libro es a finales de mayo, pero no hacen falta ferias para verse, no? De hecho los encuentros son siempre memorables, por cortos que sean.

estrella dijo...

Hola Ada. Te echaba de menos. A ver si hablamos de lo de hijas y madres. Nunca nos pondríamos de acuerdo porque yo tengo esa relación un poco idealizada. Mi madre murió cundo yo era niña. Para ti las felicidades que todavía bregas con ellos, son jóvenes, verdad?

Anda, di “hola” de vez en cuando para saber que no nos has abandonado.

Elvi dijo...

Ultimo finde de mayo y primero de junio, creo yo. La Feria, digo. Yo espero poder madrileñear hacia el cinco de junio o por ahí.

estrella dijo...

Pues quedamos para el 5 !